En otros artículos ya hemos escrito y reflexionado sobre los estilos de liderazgo, así como las consideradas 4 competencias suaves fundamentales para liderar como son Toma de Decisiones, Relacionamiento, Influencia y Visión Estratégica.
En esta oportunidad, planteamos nuestro enfoque sobre las 5 habilidades complementarias requeridas para liderar según Kate Mckay.
1- Practicar la auto-reflexión (y aprovechar el feedback)
Parafraseando a Einstein, un sinónimo de locura es hacer más de lo mismo una y otra vez, esperando resultados diferentes.
Si no nos detenemos a reflexionar, cuestionándonos lo que ha funcionado o no para transformar la visión anhelada en realidad, es posible que cometamos los mismos errores del pasado. Sin embargo, si limitamos la reflexión a un autoanálisis, podríamos sesgar información importante a considerar. ¿Qué es lo que los demás piensan?
Manejar nuestro ego es importante para escuchar lo que los demás nos comuniquen, ya que como dice el refrán “no es lo mismo llamar al diablo que verlo venir”. Decir que estamos abiertos a la retroalimentación de los demás, no es lo mismo que abrirnos al feedback sin tomarlo como algo personal. Como líder, la gente más valiosa es la que está tan comprometida que te dice de una manera honesta y directa lo que piensan que no está funcionando. Un coach te apoya a distinguir de una manera objetiva qué es lo que podría ser que no estés distinguiendo o escuchando, que podría ser la diferencia que estás buscando para lograr resultados extraordinarios.
Por ejemplo, una retroalimentación que hemos escuchado del personal en diferentes empresas ecuatorianas, considerando que aproximadamente el 90% son empresas familiares, es que a menudo las personas que toman las decisiones en las empresas no se enfocan en lo que es beneficioso para la compañía (clientes y stakeholders), sino en obtener la aprobación de la familia en el orden de jeraquía que corresponde a padres, hijos y otros parientes del grupo familiar. ¿Qué está entre tu y tus resultados?
http://www.youtube.com/watch?v=5kIdRYychhw
http://https://www.youtube.com/watch?v=g7dUyKpugeA
2- Ser proactivo en vez de reactivo (alineando los pensamientos y las emociones)
Ser proactivo tal vez implique mucho más que adelantarse a los problemas. ¿Has escuchado el cuento del hombre que pide suero antiofídico porque ve a la serpiente venir? Aparentemente se está adelantando al problema, pero no está distinguiendo otras opciones que vayan más allá del mismo. Probablemente esté siendo reactivo, aunque esté tomando acción en pro de solucionar el problema. ¿Qué otras opciones tiene y cuál está escogiendo? ¿Qué opción transformaría la Amenaza en Oportunidad? ¿Qué Fortalezas podría desarrollar ante la aparente Debilidad frente a la serpiente? Si no tienes una visión clara de a dónde quieres llegar puede ser complejo distinguirlo. ¿Estás siendo proactivo o reactivo? ¿Estás enfocado en el resultado o en los obstáculos? ¿Estás escogiendo o estás reaccionando? ¿Tus pensamientos y tus emociones se alinean con lo que deseas experimentar?
http://www.youtube.com/watch?v=_GPkC2JkFow
3- Encontrar un “por qué” inamovible
Según Warren Bennis, liderazgo es la capacidad de transformar la visión en realidad. Si no tenemos un “por qué”, una meta, un sueño, un propósito que nos inspire, probablemente no lideremos a nadie, empezando por nosotros mismos. Probablemente la mayor utilidad del liderazgo es la capacidad de crear alineamiento de equipo para lograr ese resultado como una consecuencia de ese “por qué” colectivo que nos mantiene inspirados para seguir logrando otros resultados congruentes con el propósito de existencia del equipo. ¿Cuál es ese “por qué” inamovible para ti? ¿Es un “por qué” inamovible para los demás? ¿Qué diferencia crea en el mundo? ¿Has descubierto cuál es ese sueño o meta por el que estás dispuesto/a a darlo todo?
http://https://www.youtube.com/watch?v=6RTpJsjwTz4
4- Sentir pasión por lo que haces
Este punto podría estar vinculado con el anterior más allá de lo que has considerado. Si no has descubierto una meta o un sueño que te inspire o apasione, es probable que termines cumpliendo con lo que piensas que los demás esperan de ti sin más gratificación que el placer momentáneo de recibir la remuneración económica. ¿Estás siendo apasionado por lo que haces? La gente no hace lo que le dices que haga y como le dices que lo haga, en liderazgo la gente hace lo que tu haces y como tú lo haces. Si no estás siendo apasionado/a con lo que haces, esperarlo de los demás podría ser otro sinónimo de locura. Varias investigaciones han descubierto que la emoción es un componente fundamental para liderar. Martin Luther King Jr. pronunció su discurso “Yo tengo un sueño…” no fue “Yo tengo un proyecto…” ¿Quién estás siendo?
http://www.youtube.com/watch?v=UFi34Qef0bM
5- Estar preparado para hacer lo que otros no
Si has creado la habilidad de apasionarte e inspirar a los demás con el ejemplo, es probable que tanto tu como la gente que quiere ser parte de tu equipo, estén dispuestos a hacer lo que sea. Ejemplo abundan. Los hermanos Wright fueron equipo con sus colaboradores, fueron apasionados por su propósito e hicieron lo que otros no estuvieron dispuestos a hacer, experimentando una y otra vez, arriesgándose e inspirando a su equipo. Basado en resultados, honraron su “por qué” y crearon el vuelo tripulado. ¿Cuál es ese sueño o esa meta por la que estás dispuesto a hacer lo que sea requerido? Si no lo tienes, será un placer apoyarte a descubrirlo. Si lo tienes, será un placer apoyarte y acompañarte en el proceso para que lo logres. El nuestro no es el único camino. Hay muchos. Lo importante es que tomes acción YA.